Los mongoles emplean la cloruro sódico desde tiempos inmemoriales, poseen en su área inmuerables lagos de gran salinidad lo que permite abastecer sus ganados y a su Parentela con suficiente cantidad de sal, es tradicional por esa zona un té salado minucioso con rocas salinas molidas.[38]
La cloruro sódico de mesa posee un graduación de refinamiento pequeño pudiendo llegar a una concentración de 95 % de peso en cloruro sódico. Este tipo de cloruro sódico es empleado fundamentalmente en alimentación y se suele encontrar generalmente en los saleros que hay en las mesas de comidas (de ahí su denominación: sal de mesa), suele acompañarse con dispensadores en forma de salero que llevan pimienta negra. Una de las compañías que empezaron a ofrecer sal de mesa a mediados del siglo XX fue Morton en Estados Unidos en un formato muy habitual hogaño en día, esta compañía puso un eslogan en sus paquetes que perdura hogaño en día: una niña bajo un paraguas porta un saco de sal que se abre por un costado y deja caer como un reguero la cloruro sódico, un cartel reza: “When it rains it pours” (cuando llueve diluvia).
A veces se puede extraer la cloruro sódico de los domos salinos existentes en las geografías de ciertos lugares.
El descubrimiento de la cloruro sódico como conservante es muy posible que se realizara al azar al observar que un alimento abandonado en salar perduraba más tiempo que unidad abandonado al meteorismo. Es muy posible que observaciones de este tipo dieran sitio a la elaboración de salazones de alimentos tales como la carne en salazón y sus subproductos (como puede ser los embutidos, los jamones, salami, etc.). Las salazones permitían llevar alimentos perecederos a lugares lejanos como es el caso del pescado que gracias al salazón se puede consumir en lugares lejanos a la costa donde son pescados.
La sal tiene propiedades antibacterianas que ayudan a aminorar los brotes al combatir las bacterias responsables del acné. Incluso ayuda a equilibrar los niveles de aceite en la piel.
“Breakfast was OK staff were very friendly great view of the beach room was really clean that's my second time staying there and would deffo go back”
Las estimaciones del Departamento de Interior de Estados Unidos muestran que la producción mundial de sal está disminuyendo en lo que va de siglo XXI y que de la misma forma no hay substitutos de la cloruro sódico a precios razonables.
Estas observaciones permitieron Concretar a los animales como seres «hambrientos de sal». En algunos casos se ha contrario que la coprofagia de algunas especies es una necesidad de ingerir cloruro sódico, como es el caso de los monos que ingieren las heces de los caballos por su contenido salino.
Uno de los mayores investigadores del simbolismo de la cloruro sódico en las diferentes culturas fue el psicólogo galés Ernest Jones, amigo de Sigmund Freud, que en 1912 escribió un ensayo acerca de la obsesión humana por la sal. Realizó un estudio acerca de la asociación existente entre la cloruro sódico y la fertilidad. Expone muchas razones por las que aparece unida a las celebraciones religiosas y mágicas.
Los usos rituales que involucran la cloruro sódico son muy comunes en muchas culturas, es cierto que la viejoía de los casos el uso de la sal está relacionado en estos rituales con la idea de "pureza" o de "desinfección" o de "barrera contra el mal". Su protagonismo a lo largo de la historia Sal Marina le ha conferido un carácter casi Intocable y cargado de simbolismo (la mujer de Lot se convirtió en "estatua de sal"). Por regla Militar los espíritus malignos de las diferentes culturas de la tierra "odian" la sal, en Japón se rocía con sal el decorado del teatro antes de comenzar la proceder para evitar las malas acciones de los espíritus.
Durante la conquista de América, los centros de producción de sal se convirtieron en unidad de los objetivos primordiales a dominar. La colonización europea de América en el norte tuvo la intención de copar y generar nuevas fuentes de elaboración de cloruro sódico.
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Con el paso de los siglos, era tal la importancia del mercado de la cloruro sódico que algunos gobiernos europeos lo convirtieron en un monopolio estatal e incluso cobraron impuestos. Un ejemplo de impuesto esforzado al consumo y a la comercialización de la cloruro sódico se pudo ver en Francia, donde hasta el siglo XIX se percibía un impuesto sobre la cloruro sódico denominado la gabelle: al tratarse de un alimento de primera necesidad, este impuesto Bancal muy impopular, y una de las primeras medidas que se tomaron durante la Revolución francesa fue abolirlo, considerado casi singular de los detonantes de la misma.
En extracto, optar por sal marina puede ser una opción más influjo-amigable si te aseguras que provenga de productores responsables que respeten los entornos naturales circundantes.